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Una serie de preguntas en un blog

Ciudadano X, lo que hace falta es educación y valores para nuestro pueblo; el gobierno hace una parte, pero nosotros, como sociedad, debemos también hacer nuestra parte. Dime ¿tú qué haces para educar a otras personas?, ¿te importa?, ¿darías de tu tiempo para que personas menos privilegiadas que tú puedan adquirir mejores preceptos?, ¿estarías dispuesto a ir a una ciudad perdida a instruir a estos hijos del olvido? No me vayas a contestar como Fox.

Sin afán de demeritar a nadie, he podido constatar que entre camioneros y microbuseros desfilan personas muy ignaras, con mentalidades muy pobres y con muy malos modales (ello no implica, lógicamente, que todos los camioneros y microbuseros sean así; de hecho, muchos no son así). Yo viví gran parte de mi vida en Cuautitlán Izcalli, Edo. de Méx. Hasta hace tres años que vine a vivir al D. F. y ¿sabes cuál fue mi primera impresión de la ciudad capital? Vaya, aquí los choferes de camión y microbús sí que tienen educación: se esperan a que bajes del camión para arrancar, es difícil que hagan la parada en un lugar no indicado, no corren a exceso de velocidad, etc. Y pensé ¡cómo se ve que los capitalinos que se quejan al respecto nunca han vivido en el Edo. de Méx.!

¿Tienes idea, Ciudadano X, de la cantidad de muertes que hay al año en la Autopista México-Querétaro debidas a los choferes de transportes públicos?, ¿tienes idea de las velocidades tan estrepitosas con las que manejan?, ¿tienes idea de lo majaderos que son?, ¿de lo caro que es el transporte allí (diez pesos del metro Toreo a Izcalli; trece pesos de metro Chapultepec a Izcalli)?, ¿de la forma tan nefanda en que manejan, metiéndose siempre en el carril de los coches pequeños? ¿Sabes que allí sí existen mafias de transportistas como la de Axel García, otrora presidente municipal de Cuautitlán Izcalli? ¿Sabes que esas mafias han asesinado a simples choferes por interferir en sus intereses?, ¿sabes que es imposible que el gobierno del Estado de México no sepa de esto?, ¿sabes que las cosas no cambian allí, sino que siguen peor?, ¿sabes que esto se debe al cruce de dos factores: por un lado, la corrupción del gobierno del estado; por el otro, la suma ignorancia, falta de instrucción y de valores morales por parte de estos trabajadores? Por supuesto, todo esto no justifica que del segundo piso caiga un camión de basura; no justifica que las autoridades (pero las autoridades son varias personas en coordinación) no pongan el orden allí. Pero, te repito, mientras nuestro pueblo siga todo lo corrompido que está: sin valores axiológicos, sin capacidad de pensamiento crítico, sin inventiva para proponer alternativas de solución, mirando siempre la novela del “canal de las estrellas”, alienados viendo esa cosa atrofiante que es el fútbol, tomándose a pie juntillas todo lo dicho en los medios oficiales, desconociendo su Historia, prefiriendo una cerveza a un buen libro, conformándose con cualquier logrito insignificantes, etc. Mientras mi pueblo siga así, las cosas seguirán así.

Es hora de una revisión autocrítica de nuestra idiosincrasia (leerse El Laberinto de la Soledad de Octavio Paz o El Pueblo que no quería crecer de Ikram Antaki podría ser un buen comienzo), de los valores que nos conforman. Vivimos en un país en el que los más jóvenes dan la vida por un ipod, cuando lo que debería arrancárselas es la posibilidad de construir máquinas que compitan con iPods —máquinas hechas por mentes mexicanas— como hacen, por ejemplo, los indios (hindúes, si se prefiere).

Mirémonos y preguntémonos ¿qué está mal en lo que hago cotidianamente?, ¿basta con ser personalmente exitosa para que mi país avance?, ¿basta con el trabajo que hago en lo individual? ¿Qué, acaso, no debemos trabajar, en paralelo, desde dos vertientes: la vertiente individual (la de mis logros y anhelos personales) y la vertiente colectivista (aquella en la que me reconozco como elemento de un grupo —mi sociedad— y en la que, en consecuencia, debo trabajar como parte de dicho grupo)? ¿Soy una persona honesta o mentirosa?, ¿soy solidaria?, ¿soy envidiosa o me da alegría saber que a otros les va bien?, ¿Debo molestarme porque otros sepan más o sean mejor que yo y estúpidamente tildarlos de presumidos o debo, mejor, trata de emular los aspectos positivos de estas gentes? ¿Soy consciente de que siempre habrá gente sabiendo más y menos que yo?, ¿soy tolerante?, ¿discuto por ganar una discusión o por llegar a la verdad?, ¿admito que puedo equivocarme?, ¿reconozco que la fracción de la realidad que ignoro es vastísima y que, por ende, debo intentar conocerla más?, ¿reconozco cuando me equivoco?, ¿ayudo a los demás desinteresadamente? ¿Busco la verdad por encima de todas las cosas —y aquí no admitiré ningún relativismo epistemológico—?, ¿cuántos libros leo al año?, ¿conozco toda la Historia de mi país o, por lo menos, soy un gran conocedor de alguna parcela de la Historia de México (por allí se empieza)?

¿Leo el Diccionario? ¿Me interesa conocer la estructura de otras lenguas?, ¿cuántas lenguas romances hay además del español? ¿Conozco el método científico, ese modo de proceder a fin de allegarme de conocimiento válido, legado a toda la humanidad por las mentes renacentistas e ilustradas más lúcidas de su época? ¿Creo en esas charadas de los ovnis? Si creo en Dios, ¿por qué lo hago?, ¿por fe?, ¿por tradición?, ¿porque así me lo inculcaron mis padres?, ¿Porque experimento un genuino y profundo sentido de espiritualidad que me hace sentir unida al Cosmos? o ¿Porque me siento sola y desamparada ante la imposibilidad de un ser superior? o, peor aún, ¿porque ya no tendré a quién pedirle por la salud de los míos y por su bienestar material? ¿Qué representa la virgen de Guadalupe en mi mexicanidad? ¿Soy malinchista-snobista? ¿Soy nacionalista?, ¿entiendo que el buen nacionalismo es el que rechaza todo imperialismo?, ¿Me da miedo ser nacionalista porque ya no está de moda? ¿Conozco a los más grandes pensadores de mi país (José Vasconcelos, Alfonso Reyes, Rosario Castellanos, Octavio Paz, José Revueltas, etc.) o me conforma conocer el pensamiento de los filósofos alemanes (Nietzsche, Kant, Heidegger, etc.)? ¿Tengo una postura frente al origen del hombre?, ¿soy creacionista o evolucionista o ninguna de las dos? ¿Tengo conciencia del vivir de otros pueblos, de sus idiosincrasias, de sus aportaciones? ¿Conozco la trayectoria de los presidentes que han gobernado a mi país? ¿Sé en qué período sexenal México tuvo su mejor desempeño? Y, ¿a qué se debió esto?, ¿a factores internos, externos o a una mezcla de ambos? ¿Es conveniente el modelo de libre mercado (el neoliberalismo, vaya) para mi país?, ¿por qué sí?, ¿por qué no? ¿En qué está sustentado?, ¿quiénes son sus ideólogos y cuáles son sus postulados? ¿Cómo son las relaciones internacionales de México con el resto de los países del orbe? ¿Sé, por ejemplo, que el 90% de nuestras relaciones comerciales se celebran con USA sometiéndonos con esto a una dependencia económica que data de los años del avilacamachismo?, ¿sé cómo ha evolucionado o involucionado el campo en mi país a raíz del TLCAN-NAFTA? ¿Sé cuáles son todas las diferentes lenguas que se hablan en mi país?, ¿además del inglés y el español, hablo alguna de dichas lenguas?, ¿por qué?, ¿es que someto todo a un rasero utilitarista?

¿Conozco la orografía de mi país, su geografía aunque sea en mapas? Aparte de mi perfil profesional, ¿qué talentos tengo, qué me interesa?, ¿me inclino por el arte o por el deporte o por una mezcla de ambas cosas? Cuando voy al súper, ¿me aseguro de comprar productos mexicanos —y con ello alentar la producción nacional, tan muerta, por cierto, a raíz del nuevo liberalismo— o prefiero lo “made anywhere, except in México”, ¿amo la poesía?, ¿miro las estrellas?, ¿quiero y cuido a mis hermanos, los animales?, ¿sé disfrutar de una tarde dominical bañada en luz?, ¿la sonrisa de un niño, cualquier niño, me devuelve el aliento?, ¿subestimo a mis semejantes?, ¿me siento superior a todo mundo?, ¿soy amable cuando voy a las compras o soy una cretina que maltrata a medio mundo?, ¿amo el conocimiento per se?, ¿he plantado un árbol?, ¿he rescatado a alguno de esos pajaritos que tristemente caen de sus nidos? ¿Leo el periódico diariamente?, ¿me informo con objetividad sobre la situación nacional?, ¿me importa si los demás se informan?, ¿sé si la señora de la esquina no se informa porque no tiene Internet o porque no le alcanza para el periódico?, ¿y si le digo que una muy buena opción es el radio? ¿Qué es la democracia?, ¿realmente es ejercida en nuestras naciones? ¿Asisto a las juntas vecinales a fin de enterarme de lo que ocurre en mi localidad y opinar al respecto? ¿O me espero a que se tomen malas decisiones y, ergo, me limito a quejarme? ¿He leído a los griegos? ¿Qué conozco de la cultura antigua, la azteca, que precedió a los españoles?, ¿qué sé sobre los mayas?, ¿cuántos millones de años tiene la Tierra de formación?, ¿qué es el Big Bang? ¿Conozco la teoría del campo unificado?, ¿qué es la mecánica cuántica, ¿qué es un agujero negro?, ¿qué dice la relatividad especial de Einstein? ¿Por qué explica mejor —a escalas cósmicas— el funcionamiento del Universo que la mecánica newtoniana? Dado que llevé clases de aritmética en la escuela elemental, debo saber distinguir a un número natural de un número entero, a un número racional de un número entero. ¿Por qué la Matemática es tan fundamental en el progreso del hombre? ¿La matemática se limita a saber hacer cuentas, no debería ser eso trabajo de contador? Si los matemáticos no sólo se dedican a contar, ¿qué más hacen? ¿Quiénes son los más grandes matemáticos de la Historia? ¿Y de México?

Las leyes jurídicas ¿por qué son importantes?, ¿he leído alguna vez la Constitución mexicana? ¿La Biblia? ¿Sé en qué año se formó la ONU y cómo está constituida?, ¿sé a qué responde el conflicto árabe israelí? ¿Cuándo el patrón oro dejó de ser vigente y por qué? ¿De cuándo data la dolarización de los mercados?, ¿por qué la especulación financiera es responsable de la crisis económica mundial y hasta qué punto los gobiernos del mundo —incluido el mío— auspiciaron esta barbarie? ¿Realmente Hugo Chávez es ese monstruo que la propaganda mediática presenta o hay una razón de otro tipo para que nos lo presenten así? ¿Cómo se gobierna en Venezuela? ¿Cuál ha sido su crecimiento económico? La Historia, ¿debo aceptar la Historia oficial de los libros como verdad revelada?, ¿hasta qué punto es menester revisar la Historia en los libros escrita? Las preguntas que tengo sobre la vida ¿debo sofocarlas?, ¿debo suprimirlas? Por ser mujer, ¿mi esfera de acción está circunscrita al hogar, al cuidado de los hijos y a la reproducción? ¿Puedo querer no tener hijos y ser sólo ser humano?, ¿Puedo querer sí tener hijos y no sentirme por ello “old-fashioned”? ¿Es la Selección Mexicana de Fútbol realmente la selección mexicana?, ¿no son, acaso, un grupo de once individuos elegidos arbitrariamente por los dueños del dinero (los dueños de los equipos de fútbol)? ¿Y si al mejor jugador mexicano de fútbol nunca lo conoceremos porque, sencillamente, juega en un llano y es un joven humilde al que no le interesa la notoriedad ni el dinero, sino sólo disfrutar del balón? ¿Y si lo mismo pasa con poetas y músicos? ¿Y si la gente más sencilla es la más hermosa y si no? ¿Y si entiendo que compro y compro y compro y nunca hallaré satisfacción porque la sociedad de consumo que me alberga me ha condicionado a ser un esclavo de sus productos? ¿Y si todo el tiempo inquiero y no me conformo con cualquier explicación dada?, ¿y si me atrevo a disentir y, con ello, a pensar? ¿Pienso?, ¿soy?, ¿acudo al silencio? ¿He planteado todas las preguntas fundamentales? y, ¿puedo enriquecerme con las de otros?

—¿Y si a veces me relajo y soy tontísima?

—Bueno, eso es evidente, pero tú —de todas maneras— no dejes de preguntar.
 
Lo escribí en 2010 en un debate en el blog referido con la intención en ese entonces de ayudar a bien pensar a mis contemporáneos. Se suprimió únicamente el primer párrafo, que es muy breve, a fin de no restar de coherencia y sentido al escrito. En esa época no había tanta gente escribiendo para plantear preguntas y pensar. ¿Por qué? Simple, porque no habían dado con mi blog para plagiarme. De ese es el tamaño de la vergüenza que tienen los idiotas que un día se toparon con mi blog y se dedican a plagiarme: saberse ordinarios, zafios y estúpidos y para ocultar su propia vergüenza y su sentido de oprobio contra mí (¡yo, que osé a superarlos!), se dedican a plagiar mis textos y masificarlos al tiempo que me acosan selectivamente en las redes, de forma planificada. Jajaja Las preguntas originalmente las publiqué en este enlace: Publicado el 20 de enero de 2010, tomado de aquí:
 

El párrafo que le quité en un principio es éste:

Eleutheria Lekona 20 de enero de 2010, 20:31

PRIMERA PARTE

Se cayó porque, en realidad, se trata de una vía a la que tienen prohibido el acceso este tipo de camiones. Es muy paternalista de tu parte -otra vez- que quieras que el gobierno pague por algo que él no decidió hacer. Y mira que este gobierno de Ebrard tiene bastantes cosas para espetársele, pero no me parece que ésta sea una de dichas cosas. 

La representatividad en el INE es una no representatividad

La representatividad de los grupos de poder en el INE es una representatividad que hasta la fecha se presenta como palmariamente nebulosa, puesto que esa “representatividad” solo es concerniente a los grupos señalados. Solo ellos están representados, en los hechos, de forma clara a través del INE, y solo ellos están interpelados de forma eficiente de manera que su participación es manifiesta, los demás no lo estaríamos. Esta representatividad que interpelaría a dichos grupos de forma clara, dejaría sin explicar cómo es que los demás sectores populares estaríamos representados.

Si bien tradicionalmente hay muchos mecanismos de representación, lo cierto es que en México nada más están representados los partidos políticos, algunos grupos parlamentarios y supuestos grupos que representan a la sociedad civil, pero fuera de esos grupos, no hay mayor representatividad. Y, más importante, los mecanismos para que esa representatividad sea efectiva no son transparentes, son opacos. No queda claro cómo es posible que esa representatividad sea efectiva ni cómo se da en términos operativos. No es claro cómo se da esa representatividad entre los consejeros del INE y los representantes de gobierno a nivel de dicho organismo, quienes serían el enlace entre el INE y la ciudadanía. Ni tampoco sabemos cómo ni en qué forma los consejeros representarían los más genuinos intereses de la sociedad civil, ni cuáles son los mecanismos bajo los cuales la voluntad ciudadana queda expresada a través de dichos consejeros y de los demás grupos políticos que participan en el INE. 

Tal vez podría objetarse que los grupos parlamentarios, en tanto congresistas, ya están cumpliendo con esa función de representarnos. Sin embargo, los problemas estructurales que subyacen a la democracia mexicana tornan imposible esa relación. La democracia mexicana, hasta la fecha, es una democracia representativa y muestra serias dificultades, al nivel de sus instituciones de gobierno, para que pueda consolidarse como una democracia participativa. En realidad, el actual gobierno de México es el primer gobierno, en años, sino es que el primero de ellos, en instrumentar mecanismos de participación ciudadana que asemejan los mecanismos de participación más tradicionales definitorios de las democracias participativas, pero dista mucho para que, a nivel de sus instituciones, como ya se mencionó, esa democracia participativa pueda tornarse en una democracia más directa y opere, de hecho, sin obstáculos. Y este es el problema precisamente que encontramos ahora mismo en el INE. 

El hecho de que sus grupos de representantes sean tan reducidos en número y en miembros y el hecho de que no haya mecanismos claros que transparenten la relación de representatividad entre consejeros y ciudadanía, demuestra que esta representatividad es cuando menos dudosa, si no es que ilusoria. 

Por lo tanto, urge que la sociedad civil y ciudanía exijamos claridad a este respecto. 

Por todo lo expuesto anteriormente, concluimos que la representatividad de los grupos de poder en el INE es una no representatividad y exigimos que esta falta de representatividad sea resuelta a la brevedad.

TEMAS

Anda en las redes el rumor de que, con la cooperación del MOSSAD (el servicio de inteligencia israelí) el país imperial mandaría a enfermar a Chávez. Una de las personas que está investigando esta posibilidad es la abogada y periodista Eva Golinger a quien he tenido oportunidad de leer en un libro coescrito con el canadiense Jean-Guy Allard en donde documentan la injerencia yanqui en América Latina en los últimos años (por cierto, ni Enrique Krauze ni Mario Vargas Llosa salen bien parados allí). La verdad es que no tengo la más remota idea de si esto sea posible y no voy a dar crédito a la teoría hasta que salgan a luz pública las pruebas incontrovertibles de ello; la gente se enferma de cáncer, aunque también es verdad que los indios de América, me parece, son menos proclives a esa degeneración de las células. No sé, especulo. Pero así como no le voy a dar crédito a esto, tampoco lo voy a descartar a priori. Me mantengo escéptica.

De acuerdo con Golinger esto mismo se habría intentado ya (aunque sin éxito) con Fidel Castro, por ejemplo. Seguro todo mundo que se informa por Internet ya vio los vídeos y hasta la página de un organismo civil en EUA exigiendo al gobierno la desclasificación de la información CIA sobre Chávez.

Más allá de los probables visos conspiranoides de esta teoría y con independencia de su probable falsedad —o verdad— lo cierto es que Washington debe andar levemente preocupado, pues la muerte de Chávez ha parecido despertar cierta conciencia dormida en algunos. Lo digo por las reacciones que he visto en redes.

Quiero decir a este propósito —me refiero a la pujanza de Chávez— que veo en él la estatura de un Bolívar. Por supuesto, no ha faltado gente (como un amigo) que ha tildado de muy soberbia la negativa de Chávez a abandonar el poder hasta la hora de su muerte. Pero yo me pregunto si no será, más bien, la soberbia del hombre postmoderno (su dios para sí mismo) lo que le impida en un acto de humildad reconocer en este hombre a un titán (o en cualquier otro). (La gente puede adorar a Ladies Gagas y dioses del fútbol, pero cuidado con admirar —o adorar— a un hombre que entregó su vida a asistir a otros y liberarlos; cuidado con eso, eso no se puede).

Hay muchas premisas falaces (y de la pereza) que se suelen esgrimir ante hombres como estos; una es decir que estos hombres suelen subestimar la capacidad de sus pueblos para salir adelante sin ellos. La verdad, es que esta posición yo no la comprendo y me parece una mala lectura de la Historia, porque lo que hace, justamente, es subestimar el deseo de los pueblos —que se supone es un principio democrático— de escoger a sus gobernantes. Los pobres venezolanos, como muchos pobres del mundo, conformaban las filas de desheredados de la tierra, los desarrapados del mundo que el capitalismo expulsa como escoria. Chávez vino a restituir de su dignidad a esta gente y fácticamente les dotó de mejores condiciones de vida; luego, entonces, no es que haya sido una soberbia de Chávez lo que lo mantuvo en el poder durante catorce años, sino la libre voluntad del pueblo que volvía a reelegirlo en elecciones libres a lo largo de todo el tiempo que gobernó (en la última elección de octubre del año pasado, votó por él cerca del 60% de la población electora). A veces no entiendo, cómo personas que creen en la democracia, pueden llegar a tan desafortunadas conclusiones (por contradictorias).

Por otra parte, como le decía a este amigo, la no reelección es un principio antidemocrático. No es la duración de un mandatario en un puesto el mejor indicador —o criterio— para medir la salud de una democracia; ni tampoco, por otra parte, las supuestas democracias occidentales han constituido ser el mejor gobierno. Como caso, le cité al rey filósofo, Federico II de Prusia, que fue la encarnación viviente de los llamados despotismos ilustrados y que, en el caso del despotismo de este rey, se trató de un gobierno más fecundo y más benéfico para sus súbditos que muchas de las actuales supuestas democracias.

En fin, temas.

Publicado originalmente el 7 de mayo de 2013 en mi cuenta Facebook, en este enlace: https://www.facebook.com/checkpoint/828281030927956/?next=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2Fje.suis.eleutheria%2Fposts%2F276164765849158

Mar 7, 2013, 12:30 PM

 

 

 *Se publicó el 27 de diciembre de 2023 en el blog.

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