Carta a una amiga sobre un tema delicado

Por supuesto que lo entiendo y por eso nunca en la vida a ti ni a un montón de gente que está en las redes las he acusado de plagio. Yo más bien te preguntaría a ti, ¿cuántas veces en la vida te he acusado de plagio? Porque yo que recuerde, ninguna. ¿Por qué? Porque aunque muchas veces que te he leído he encontrado similitud en nuestras aseveraciones, no encuentro fuera de allí ninguna otra evidencia que indique o sugiera que tú estés plagiándome. Sé que tú no estás plagiándome. Eso es muy claro para mí. Es evidente que tú piensas y que no necesitas de mí para pensar ni muchísima gente más. Tengo la suficiente lucidez en mi cerebro para distinguir cuándo alguien está plagiándome y cuándo no. Por eso aunque entiendo tu argumento y lo respeto porque te aprecio y te valoro mucho, me parece innecesario. Porque yo no estoy hablando de lo que estás hablando tú, yo estoy hablando de otra cosa. Yo estoy hablando de plagio, no de coincidencia de ideas. En particular, estoy hablando de plagio, acoso y espionaje y no voy a cejar en denunciarlo. Estoy hablando también de un grupo de delincuentes cooptando mis textos para crear material reivindicativo con referencias feministas en redes. Todo el #MeToo está basado en mis escritos, ideas, frases y demás. Todo. Pero no solo el #MeToo de México, un montón de contenido más. ¿Cómo hacerles entender que hackearon todos los escritos de mi computadora y los utilizan? Cartas, correos, chats, ensayos nunca publicados, aseveraciones, reflexiones, un poco de poesía. Lo hackearon y todo esto que hackearon lo escribí yo. Por otra parte, no me dedico a subestimar a la gente y sé que hay gente perfectamente inteligente que puede llegar a aseveraciones similares a las mías sin necesidad de plagiarme. Tengo más de diez años en las redes y de esos diez años solo los dos últimos de mi vida me he dedicado a decir con todas sus letras que hay gente que está plagiandome, no porque esté alucinando ni porque haya sido una cuestión que se le antojó a mi mente, sino porque es un hecho. Y hay una serie de sucesos, falsables, que lo corroboran. En el caso de este texto que tú compartes y que estoy mencionando, no es una suposición mía, Hortencia, se trata de un caso de plagio duro y rotundo de mis textos. Tal vez tú no conozcas las miles de páginas que yo he escrito y no lo puedas autentificar, pero yo sí, Hortencia, y me basta con tal para decir que esto está inspirado y completamente basado en mis escritos. Es un plagio y hay evidencia que lo demuestra. Lo cual significa que hay gente que se dedica a copiar el contenido de otros porque carecen de cerebro y no pueden crear nada por sí mismos. Pero también significa que hay gente que puede ser más apetecible y más jugosa para plagiar. Que dos personas puedan escribir una idea parecida con lenguaje parecido sin intervención de plagio, no significa que esto mismo no pueda ocurrir pero con toda la intención de copiar y de hacer creer que no hay plagio. De hecho, así es como operan los plagiarios. Los plagiarios son malintencionados pero planifican. Y tienen todo el Interés del mundo en ocultar el plagio. La gente que me copia y se basa en mis escritos para producir textos basura pone todos los esfuerzos del mundo para que no se note su plagio, para que parezca casual y sin embargo yo lo noto, sé que me plagian. Y también observo que es una actitud deliberada y manipulativa que está hecha con toda la intención de suavizar el plagio. ¿Por qué? Porque es así como operan los plagiarios. Tapando y manipulando para matizar el plagio. Sin embargo, querida amiga, este texto que tú compartiste es un plagio a mis escritos --a cientos de ellos--, para mí es evidente y no puedo evitar decirlo, y no quiero, porque creo que no está bien. Yo en verdad te aprecio mucho y te considero una mujer súper inteligente a la que aprecio un buen, pero de verdad no me puedo quedar callada frente a esto. Es que no, no es correcta la deshonestidad y hay que denunciarla. Basta de tanta corrupción.

0 comentarios:

Blogger Templates by Blog Forum