Quedé de aquellas fuerzas liberada, de aquellos hechizos manantiales que opacaban la tibieza de mi sol.
Y veo venir la lluvia y viene ya.
Nunca había gozado tanto los días previos a un verano: la noche coronada por música hermosa con allá afuera los pisos mojados.
Y este abrigo aquí, siendo otra vez yo, la que siempre ha sido.
Me atraen las entradas con prosa.
ResponderEliminarY esta me causa un poquito de estremecimiento.
Solo un poquito.
¿Por que?
Me gusta que preguntes fre. Por otra parte, yo no sé a qué te refieras cuando dices que te ocasiona un poquito de estremecimiento... pero, hagamos una cosa, ¿quieres?, quedémonos con nuestras preguntas.
ResponderEliminarTe abrazo.