Hago allí un alto, en mi cielo* -de eso hablo.





Ningún indulto requiero para ser quien soy porque he sido yo -y nadie más- quien eligió ser esto, quien tomó la senda para llegar hasta aquí. Libre elegí, decidiendo. Cuando se decide, se topa uno con bifurcaciones. Algunas veces -al decidir- puedes tomar más de una elección; otras, las elecciones son mutuamente exclusivas y entonces sólo se toma una. Yo recuerdo varias de las bifurcaciones frente a las que me he parado. Varias de ellas han definido en forma única mi derrotero y, mientras elegía, no sólo era a plenitud consciente de ello, sino que asumía todas las posibles pérdidas que con ello devendrían, creyendo siempre –eso sí- que habría algún modo de recuperar -sigo creyéndolo: se entiende que no sólo veo las pérdidas, también las ganancias. Cada persona posee una única y peculiar riqueza; no existe una sola veta de sabiduría para todas, ni nadie es mejor por haber hecho esto o aquello otro. Uno puede aprender de quien menos se lo espera y el recíproco también es cierto. Ignara no soy –en lo absoluto- de todos los rasgos de mi ser susceptibles de mejora, mas me hallo esencialmente “feliz” –aunque las comillas no son pequeñas- siendo esto que soy. Y sí me siento proclive –en todo momento- a las correcciones. Si con mi ser puedo yo iluminar la vida de otros, dar algo de mí a los demás, gustosa lo haré; lo mismo que recibir la luz de aquellos a quienes amo. Nunca me he tenido que esforzar demasiado para encontrar la poesía en otros, la belleza en los demás y, por ello, me congratulo. Disfruto plenamente de la soledad y, al mismo tiempo, puedo pasar largas y alegres horas en compañía de mis amigos de quienes, sus sonrisas, constituyen de ellos la cosa que más atesoro (es muy claro para mí cuando logro establecer con alguien alguna afinidad y eso es algo que pondero sobremanera porque no todo el tiempo se le presentan a uno tales serendipias). Elijo una palabra para definirme y ésta es simpleza. Simple (y también simplona), sencilla y un poco transparente –como el agua. Por otra parte, entiendo el ser de otros viviendo en la inmediatez, mas yo he prescindido de ello y creo hallarme en las antípodas de tal conducta. Y no me arrogo -no- el derecho a criticar las personalísimas elecciones de los demás. Si alguna injusticia sobre mí o sobre otros es cometida, no tengo miramientos en hacer salir toda la rebeldía de mi espíritu, toda su insumisión. Sublevarme se convierte, entonces, en un acto de contestación. Por otra parte, por lo regular mi espíritu es apacible, juguetón y muy risueño. Hay, también, una parte de mí que se inclina de forma manifiesta hacia la melancolía y hacia todo aquello que toma visos de oscuridad. En estos casos he tenido que ser muy cuidadosa, tomándome sólo las dosis que, infligiéndome placer no -sin embargo-, vulneren a mi espíritu que es, de suyo, frágil.

Hay días que una ingravidez enmudecida se apoltrona en mí o que pareciera vivo a la servidumbre de algún imperio de soledad. Hay días que todo parece absolutamente lejano y la vacuidad toma el trono. No sé cómo exactamente lo logro, pero siempre logro retornar. Quizá sea la estrella que me obsequió mi madre siendo niña; quizá haya ocurrido ese día, aquella noche en que mirando yo embobada al cielo nocturno me dijera ella, tiernamente: “elige un astro, porque ese astro estará para iluminarte siempre y resolver alguno que otro problemita tuyo” quizá esa ráfaga de luz, que a veces es mortecina, todavía ilumina en mí. Tal vez.

Amo el cielo nocturno –la bóveda estrellada-, toda la poesía, el misterio, los símbolos, amo la música, a los planetas, lo que nos ha dado esta tierra, la idea de un infinito. Amo, también, a cada uno de los seres que han tenido influencia en mi vida. Y existe esta melodía que me gusta mucho porque pienso que es mi canto.

Llevo ya tu luz dentro y en mí persiste –aún- este espíritu niño.

8 comentarios:

    Hola Eleutheria, felicidades por tu entrada. Muy inspirada.
    Llegue a tu página por recomendación de PoKaMa de La poca madre de los poderosos. He leido algunas entradas tuyas y me han gustado. Veo que no tienes problema en expresar lo que sientes y ademas de buena manera.
    Es por eso que te quiero hacer la invitación de formar parte de los autores de Despierta Libertad www.despiertalibertad.blogspot.com
    En este blog tendras absoluta y total libertad de escribir y expresar lo que gustes sin ningún tipo de censura. La idea es un poco el poner las mismas entradas (sobre todo las de a título personal, aunque eres libre de hacer lo que quieras) que pones en tu blog puesto que no quiero incomodar ni presionarte en nada.
    Este es un blog que forme para reunir a diversos autores de blogs que produzcan su propio material o que deseen expresar algo.
    Ojalá te interese y de ser asi puedes mandarme un mensaje a koan2112@yahoo.com o en mi blog www.intentandolautopia.blogspot.com
    o si lo prefieres en Despierta Libertad.
    Te agradezco tu atención
    Atte
    Koan

     
    On 17 de diciembre de 2010, 7:10 Jen Sainz dijo...

    Amiga! Cuando mis pensamientos están en sincronía con los tuyos, con los de otros entes afines (pocos) y con pequeñas escenas cotidianas que se me presentan, es cuando felizmente confirmo que voy por el camino correcto...ah la palabreja ésta no me gusta...digamos, el camino adecuado (para mí).
    Es cuando, pese a que el futuro es incierto, en mi presente abrigo certeza y seguridad en mis actos y en mis palabras por esa sintonía con mi entorno y con quienes pertenecen a él.
    Y también confirmo felizmente la existencia de la comunicación franca, honesta, clara, amorosa y de corazón sin ayuda de palabras, sólo por medio del pensamiento. Un abrazo

     

    Koan:

    Parece que tú le ves algún valor, algún plus a algunas de las cosas que escribo (gracias). Yo, por mi parte, no tengo problema en que algunas de dichas cosas quieras ponerlas en el blog que me mencionas (en realidad, escribo para “Eleutheria” y esto lo hago en mis tiempos libres). ¿Sabes? alguna vez un chico bloguero español subió algo mío allá en su blog. Me di cuenta por casualidad y cuando lo vi, la verdad, me emocioné. Yo soy de la idea de que uno no tiene qué solicitar permiso para postear lo que a uno le guste de otros blogs; a mí me basta –cuando posteo a otros blogueros- con señalar la fuente, es decir, con indicar que no es mío. A mi conciencia –a la mía- le basta con eso. Pues bueno, es todo lo que puedo decirte sobre ese punto.

    También quiero comentarte que ya me di una vueltecita por tu blog y que estaré leyéndote periódicamente. Veo que vibramos por sintonías más o menos similares. Estupendo.

    ¿Qué más? Ah sí, me han gustado varios de los contenidos que te he visto; lo único que te sugeriría es usar colores para tus tipografías que no se pierdan con el fondo, letras más grandes y justificar los párrafos. No sé, sugerencias mías. Si lo prefieres, ni las fumes.

    Me ha dado gran gusto hacer contacto contigo.

    Saludo combativo,
    Eleutheria.

     

    Pues, Jen, parece que ya somos dos reafirmándonos en lo que –hasta ahora- hemos concluido (yo también me confirmo cosas a través de otros; a ver en qué más vamos mutando).

    Un abrazo.

     

    Hola Eleutheria, gracias por responder.
    Tomaré muy en cuenta tus consejos.
    Pienso lo mismo que tu en cuanto a publicar contenido de otros autores y tan solo citarlos debidamente, a mi tambien me basta con eso.

    Ojalá te animaras a publicar directamente en el blog Despierta Libertad, actualmente solo esta una mujer y creo que la calidad de tus escritos quedaría muy bien en el blog.
    Sin duda estaré al pendiente de tus entradas y si cambias de opinión y quieres participar en Despierta Libertad (como te comentaba , si tu quisieras solo tendrías que re-publicar lo mismo que en tu blog o lo que quieras) tienes permanentemente la invitación hecha;Solo tienes que mandarme tu e-mail a mi e-mail y te hago una invitación a los autores...

    Saludos y gracias por responder.

     

    jejejeje, creo que hasta ahora que me lo comentas empiezo a ver que las letras de mi blog si estan muy chiquitas.
    Oye, buena selección de música he?, la he estado escuchando mientras escribo...no te gusta Portishead, Massive attack o Jay Jay Johanson?

    Saludos

     

    Quién pudiera en el punto en que se encuentra decir que llegó a él por las elecciones propias y no por otros motivos. Aunque, quizá no elegir, sea también una elección. Me alegra que tú lo hayas conseguido y de que brille para ti esa estrella.

    Besos.

     

    ¿Sabes "El Éxodo"? Qué bueno que me dices esto. Lo que quiero decir es que elegí de entre la gama de opciones que tenía disponibles -aunque, claro, hay unas que uno las construye. Porque también es cierto que hay cosas que, por no estar -digamos- en tu horizonte, ni las atisbas, ni, entonces, menos habrías podido elegirlas. Claro, hay cosas que uno nunca elige y te pasan. Tal vez sólo me entienda yo porque soy yo quién sabe a qué partes específicas de mi ser me refiero. Creo que eso -como muchas cosas que pongo aquí- lo escribí, más bien, para mí. No importa.

    Gracias por leer y comentar.
    Te envío un abrazo.

     

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