Cayetano

No me he atrevido en todo este tiempo a hablar aquí de Cayetano Cabrera Esteva (con ochenta y seis días en huelga de hambre) y de sus compañeros del SME que desde el zócalo lo acompañan, por respeto, porque no me parece que ni él ni su lucha sean motivo de un post en este lugar menor que es mi blog. Son tan dignos él y la gente con él, su lucha, tan legítimos que creo que “Eleutheria” no es digno de ellos. No sé si me entienda, no lo pretendo. En todo caso, los blogs amigos que difunden su estado, como “El Blog de Radio AMLO” o “Yunqueland” o tantos otros –lo entiendo- lo hacen en el ánimo de informar. Pero esos blogs -a diferencia del mío- se han convertido en bastiones de la libertad mediática -o intentan serlo- en un país en el que la censura está a la orden del día, en un país en el que los comentadores de noticias más populares se dedican a editorializar la noticia, a abusar del poder que les confiere el micrófono para imponer sus propias opiniones alejándose de la práctica periodística más ética, desvirtuando no sólo luchas tan legítimas como la del SME, sino tergiversando completamente el verdadero y real sentido de lo que debiera ser informar. Lo sabemos, trabajan para compañías poderosas (monopolios) dedicados al ramo del espectáculo y la comunicación, compañías como Televisa o Azteca, que cuentan con todos los recursos económicos para llegar a los más recónditos rincones de la República y ejecutar, puntualmente, su cometido: homogeneizar la opinión, masificándola, haciendo de la noticia motivo de espectáculo y ocasión para el morbo, pero –sobretodo- para mantener bajo su dominio el tipo de pensamiento que quieren y desean, fluya entre la gente (afortunadamente, las personas nos damos cuenta y somos cada vez más los que ejercemos una completa autonomía intelectual y nos permitimos no sólo ser críticos, sino también disentir).

Pero aquí me detengo, no hablaré más de ese México dentro de México, de ese micromundo de hipocresía, conformismo social, cultural, moral, del México de los conformistas que, paradójicamente –y en ello radica su conformismo-, se ostentan como los triunfadores de este país.
Entonces lo digo. Este post tiene por objetivo hacer eco del comunicado que Cayetano Cabrera Esteva, ingeniero del IPN con 86 días en huelga de hambre, ha lanzado, dirigido al pueblo de México y a la Comunidad Internacional, para dar parte del tan deplorable estado de salud en el que se halla debido a:

1) 1. La reacción más legítima que gente como él, trabajadora, ha encontrado ante el despojo inaudito, cobarde (la entrada de la PFP un sábado por la madrugada después de una jornada de fútbol –nuestro opio de moda- a las instalaciones de LyFC para despojar a 44 mil familias del ingreso de uno de sus miembros) de su fuente de trabajo; dicha reacción ha sido la huelga de hambre e independientemente de que estemos de acuerdo o no con tal medida medida, así es como ha ocurrido.

2) 2. La negativa del gobierno de facto, ejecutor de la maniobra, para llegar a un acuerdo –después del daño- que dé algo de satisfacción a los trabajadores.

3) 3. Motivos más particulares que, por economía, esta vez no mencionaré.

Entonces, desde esta pequeña tarima, hago eco de su petición y la difundo. Si llega a dos, tres, personas –una- me doy por satisfecha. Lo que no podría hacer es mantenerme impávida. Por supuesto, los últimos días había fluido toda clase de información, en medios alternativos, sobre el compañero Cayetano. Sólo hasta ahora que, digamos, la información sale de él, es que me atrevo a postear aquí sobre la situación.



Cayetano Cabrera Esteva


A LA COMUNIDAD INTERNACIONAL
AL PUEBLO DE MÉXICO
A LA CLASE TRABAJADORA DEL PAIS
SALUD:

1.- Llevo 86 días en Huelga de Hambre en el Zócalo de la Ciudad de México y me siento muy mal de salud.

2.- Estoy decidido a continuar en esta Huelga de Hambre hasta que este gobierno del presidente Felipe Calderón nos devuelva nuestro empleo a los 44 mil trabajadores que fuimos despedidos de manera ilegal.

3.- El Presidente de la Republica es el único que puede resolver este conflicto. Por lo que desde este momento y de manera pública solicito que el Presidente Felipe Calderón nos reciba a todos los huelguistas de hambre en Los Pinos, conjuntamente con nuestro Secretario General y el Comité Central de nuestro Sindicato.

4.- Si el Presidente no atiende esta petición pública para resolver este conflicto de manera política, él será el único responsable de lo que le pase a mi vida y a la de mis compañeros en esta Huelga de Hambre.

México, D. F. a 19 de julio de 2010
“Por el Derecho y la Justicia del Trabajador”
Ing. Cayetano Cabrera Esteva

Tomado de: "Navegaciones"

NOTA: Tenía dudas sobre colocar la imagen, me parece un acto amarillista. Ofrezco una disculpa a quien también así lo considere.

*Modificado el lunes 15 de junio de 2015 para modificar el «halla» en negritas escrito raramente con un «haya» originalmente.

0 comentarios:

Blogger Templates by Blog Forum